Cuatro formas de financiación para mujeres
¿Cuál es una de las dificultades más grandes que tenemos las mujeres al emprender? Empieza por “F” y no es “falta de confianza. De lo que hablamos es de FINANCIACIÓN.
Muchos mensajes con los que nos bombardean a las mujeres es que para emprender lo que necesitamos es confianza en nosotras mismas. Nosotras creemos que no es un asunto de amor propio sino de recursos.
Si las mujeres no emprendemos o no lo hacemos a lo grande, no es porque nos falte empoderarnos sino porque el sistema financiero tradicional es sexista.
Y no lo decimos solo las feministas. El mismo Banco de España publicó un informe el año pasado que documenta que las mujeres tienen un 10 por ciento menos de posibilidades que los hombres de solicitar un préstamo al inicio de su emprendimiento. Y que en los años posteriores, la brecha de género asciende al 25%.
Según nos dice el Banco de España, esto ocurre porque hay un sesgo de género a la hora de conceder estos créditos(vamos a llamarlos prejuicios machistas). También dice que es porque las mujeres somos más reacias al riesgo y porque, como pensamos que no nos van a dar un préstamo, directamente no lo pedimos.
Y claro, frente a esta exclusión financiera, nos hemos ido buscando la vida, creando distintas estrategias, cómo estás cuatro que OS compartimos.
1- FONDOS DE MUJERES: “REDISTRIBUIR GRANDES FORTUNAS PARA QUE LLEGUEN A TODAS Y PARA LO QUE REALMENTE IMPORTA”
Comencemos por Calala, un fondo feminista que empieza a operar en el Estado español en 2010. Su objetivo es financiar específicamente a organizaciones feministas y, en especial, a las que se quedan en los márgenes del feminismo blanco. No prestan, donan. Y dan el dinero para que las organizaciones se lo gasten en lo que realmente necesitan. Es un dinero que dan sin muchas condiciones porque el objetivo es dotar de recursos a las entidades y no hacerlas trabajar para justificar la ayuda.
A raíz de la pandemia, y de ver que los fondos de recuperación europea no están llegando a muchas entidades sociales lideradas por mujeres, Calala ha creado un fondo nuevo: el Fondo Dalia, que es para emprendedoras y entidades con cierto grado de profesionalización. En la primera convocatoria de 2021 han financiado a 19 entidades muy variadas, las hay dedicadas a la prevención de las violencias, la crianza respetuosa o la programación.
A la hora de pedir dinero, Calala, como otros fondos de Mujeres, no hace remilgos: fundaciones privadas o mujeres con grandes fortunas que les por la filantropía son bienvenidas cuando se trata de redistribuir la pasta para que llegue a todas. María Palomares Arenas, su directora ejecutiva, lo dice así de natural.
2- SERVICIOS FINANCIEROS ÉTICOS: “LOS CRITERIOS SOCIALES Y EL RIESGO DISTRIBUIDO NOS ATRAE”
Continuamos con Coop 57, una cooperativa de servicios financieros enmarcada en las llamadas Finanzas Éticas y que ha cumplido 25 años. Coop57 ofrece distintos tipos de préstamos a entidades que buscan hacer economía de forma sostenible y justa, algo que abre las puertas al emprendimiento femenino transformador que hacen muchas mujeres. Los criterios para conceder estos préstamos y el sistema de avales, está a años luz de la banca tradicional. Nos lo cuenta Ana Lorenzo Vila, socia promotora de la sección gallega de Coop 57 y parte del equipo de Juntas Emprendemos.
3- FONDOS SOCIALES MANCOMUNADOS: “EN LA SALUD Y EN LA ENFERMEDAD”
Vamos con la tercera experiencia, Fonredess. Es un fondo como Calala pero no dona porque la ayuda hay que devolverla. Eso sí, sin intereses. Es lo que se llama ayudas reintegrables. Y al igual que Coop 57 es un fondo mutualizado, tiene una base social de socias y socios, como Charo, que ponen sus ahorros para que se pueda prestar a proyectos a los que la banca tradicional no presta. De los 18 proyectos que han acompañado desde 2018, la mitad están liderados por mujeres.
Una de las estrategias para romper con la exclusión financiera que tiene FonRedess es que además de prestarte dinero te acompañan. ¿Y esto qué permite? Pues que mujeres emprendedoras con menos recursos, incluyendo a las que vienen de una situación de exclusión social, puedan acceder a estos préstamos. Y no sólo en los momentos dulces, sino cuando la cosa se pone fea.
4- PREMIOS PARA EMPRENDEDORAS: “RECONOCIMIENTO SIMBÓLICO, PERO TAMBIÉN MATERIAL”
Y para terminar queremos hablaros de nuestra 1ª Edición de Premios de la Escuela de Emprendedoras Juana Millán, porque creemos que es otra estrategia para que las mujeres emprendedoras accedemos a los recursos.
Hay un premio en metálico de 2500 euros y otro por ese importe, pero en servicios que pueden ayudarte a reforzar alguna de tus líneas de negocio. Estos premios se darán a entidades lideradas por mujeres que comparten nuestra filosofía transformadora y de sororidad. A las que están empezando y las consolidadas. Porque queremos llegar lejos. Y queremos hacerlo juntas.
El plazo es hasta el 15 de julio y tenéis toda la información en escueladeemprendedoras.es/premios/. Recuerda que también tenemos toda una programación de talleres durante este mes de junio para ayudarte a preparar tu candidatura.