El mundo está lleno de ideas brillantes, pero son pocas las que se pueden convertir en oportunidades de negocio. Hoy te traemos una herramienta para que dejes de darle vueltas a esa idea que te ronda la cabeza y sepas por fin si es una buena oportunidad a la hora de emprender.

El método Timmons de Emprendimiento identifica 3 claves para poder convertir una idea en un emprendimiento de éxito: pone su foco en el equipo fundador, en la oportunidad y en los recursos. Según este modelo, todo proceso de emprendimiento comienza con la identificación de una oportunidad, que comprende desde la idea inicial hasta la concreción de la misma dentro del plan de negocio o plan de empresa. El objetivo de plasmar la idea en un plan de negocio es identificar la cantidad de recursos financieros necesarios para que nuestra empresa sea sostenible en el tiempo, además de ayudarnos a aterrizar el proyecto y dimensionarlo.

Una vez hemos identificado la oportunidad y conocemos los recursos necesarios para poder llevarla a cabo, debemos relacionar todo esto con el equipo fundador, el cual idealmente debería estar formado por un conjunto de personas cuyos conocimientos fuesen complementarios. Este grupo es la clave dentro del método Timmons, ya que es el encargado de identificar la oportunidad, desarrollarla en un plan de negocio y captar los recursos financieros para hacerla realidad.

Hazte 3 preguntas

Llegadas a este punto, para definir nuestra idea como una oportunidad de negocio tendremos que dar respuesta a las siguientes preguntas:

Oportunidad. ¿Es atractiva? ¿Podemos adquirir una ventaja competitiva? ¿Es el momento adecuado para ponernos a desarrollarla o debemos esperar?

Equipo. ¿Tenemos el equipo fundador las habilidades y capacidades necesarias para poder hacer realidad la oportunidad detectada?

Recursos. ¿Podemos obtener los recursos necesarios para poner en marcha nuestro proyecto?

A estas 3 claves del método Timmons podemos agregar una cuarta: el contexto. Esta hace referencia a las variables que no somos capaces de controlar y que forman parte de nuestro entorno, como la situación geopolítica, la estructura sectorial de la actividad económica, las nuevas leyes… Nos puede pasar que detectemos una gran oportunidad, seamos un equipo fundador idóneo y que dispongamos de los recursos necesarios pero que no podamos constituir la empresa al tener unos factores externos que no podemos controlar y que impiden que nuestro negocio sea un éxito. Un ejemplo obvio ha sido la pandemia de coronavirus estos últimos años, que ha afectado a muchísimas empresas que estaban empezando y a otras que ya llevaban tiempo funcionando. 

Pese a todo, si das respuesta a las 3 preguntas que te plantea este método estamos seguras de que tú y tu equipo tendréis mucha más capacidad de afrontar cualquier tipo de adversidad. Como diría Timmons, “hacer más con menos es una potente ventaja competitiva”.

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