El proceso de diseño se puede ilustrar mediante muchos esquemas pero todos tienen en común la divergencia y la convergencia de ideas. Divergencia es toda fase donde captamos información. Convergencia donde acotamos el enfoque.

Este proceso es iterativo y lo repetiremos cada vez con un mayor grado de detalle y precisión.

En el diseño es importante controlar las ideas matadoras (del tipo “Eso es imposible” o “Eso es una tontería”) porque solo conducen a callejones sin salida. Estas frases suelen evidenciar resistencia al cambio o bloqueos sociales o emocionales.

Herramientas para ejercitar creatividad

Sirven todas aquellas que ayudan a ejercitar el pensamiento lateral y divergente. Algunas de las más habituales son: 

• Crazy eights (Ochos Locos): En un equipo de 3-4 personas, cada persona coge un rotulador y un folio y lo divide en 8 partes iguales. En solo un minuto tiene que plasmar la solución a un problema en una de esas caras. Se repite este proceso 8 veces y al finalizar se ponen en común las ideas.
• Brainstorming (Lluvia de Ideas): Literalmente es una tormenta de ideas. Es una técnica grupal donde, en un ambiente distendido, se proponen ideas sin parar sobre un tema. 
• Analogías inusuales: Se trabaja sobre metáforas del problema que queremos resolver. Por ejemplo: “¿Y si (determinado problema) no ocurriera en una ciudad grande sino pequeña?” 
• Visual Thinking (Pensamiento Visual): Método que sirve para expresar ideas complejas (soluciones, funcionamiento de un servicio…) a través del dibujo. Dibujando podemos distribuir espacio, dar expresiones, crear volumen… 
• Otras herramientas: Hay muchas herramientas y métodos de creatividad como el Bodystorming, el Role Playing, el 6-3-5, el método SCAMPER, los 6 sombreros… 

Recuerda que todas estas técnicas son grupales, por eso, lo ideal es que pidas ayuda o colaboración a personas de confianza. Pueden ser familia, amigos, o incluso personas que conozcas del sector o que estén en situación similar a la tuya. También podrías buscar personas en redes sociales que estén interesadas en temas afines a tu proyecto.

Tipos de innovación

La innovación es la introducción de cambios estratégicos en una determinada estructura con el objetivo de mejorarla. Podemos identificar varios tipos:

Innovación en la experiencia de cliente: Mejorando el uso o la percepción que la clientela de una empresa tiene acerca de su producto o servicio. Ejemplo: Cuando se aligera el tiempo de espera en ser atendida, o cuando se dedica tiempo y atención a resolver una necesidad de la persona y no solo a venderle algo estándar.

Innovación en producto / servicio: Introducción de nuevos productos o servicios que atiendan nuevas necesidades (o que las generen) u optimizar la producción de los mismos. Ejemplo: Greencaf es una empresa española creada por tres estudiantes universitarios que diseñaron cápsulas reutilizables para máquinas de café Nespresso. 

Innovación en el modelo de negocio: Se trabaja para abrir nuevas vías de ingresos u optimizar costes. Por ejemplo, Comefruta es un servicio de suscripción que te permite recibir cajas de frutas y verduras a domicilio.

Innovación social: Cuando hay un impacto positivo en problemas estructurales de la sociedad como la discriminación, pobreza, violencia de género, adicciones, soledad, desempleo…Por ejemplo, Timpers es una marca de zapatillas diseñadas y fabricadas por personas ciegas que busca facilitar su integración en le mercado laboral pero también visibilizar sus capacidades.

Fragmento del módulo 3, elaborado por Lola Martín-Gil, Daniela Rogoz e Isabel Inés, de La Nave Nodriza.

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